Los bienes obtenidos limpiamente son bendiciones lo demás es desgracia

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Dios nos da la provisión necesaria, no necesitamos ser tramposos o malos para tener lo necesario, muchos ricos son pobres y miserables en su abundancia cuando lo que tienen no es el resultado de un trabajo justo 

“El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad.” Efesios 4:28 RVR1960

Todo lo que tenemos lo hemos recibido de la mano de Dios, por ello debemos agradecer siempre y aprender a vivir con eso de manera justa y honesta. La fuerza para el trabajo es una bendición de Dios y hay que hacer uso de la fortaleza para esforzarnos a trabajar con nuestras propias manos sin afectar al prójimo. La provisión de Dios nunca falta, sin embargo, debemos ser fieles con Él en el modo de ejercer la búsqueda de lo que nos quiere dar, pero también, en que debemos corresponderle en gratitud por sus bondades.

Cuando no afectamos al prójimo promovemos su desarrollo, aunque también es un mandato divino y un privilegio promover el bien de nuestro semejante de manera precisa, esto también acarrea bendiciones de Dios para nosotros y muestra cuan agradecidos y contentos estamos con Él. Cuando a costa del bien de los demás queremos obtener ganancias nos volvemos más pobres espiritualmente. 

La mayor riqueza que podemos tener, es cuando tomamos las oportunidades que Dios nos da y también las ponemos al alcance de los demás, el pan que ahora necesitamos es momentáneo, un día ya no será necesario, nuestras necesidades terminarán cuando estamos con Dios. Así que en lo que se refiere al bien material, es pasajero, y ahora que lo necesitamos hay que obtenerlo de manera correcta. 

Por lo tanto, todo lo que podamos obtener por la bendicen de Dios nos debe causar felicidad, porque Dios nos dará justo lo que él quiera usar como instrumento de su gracia para que estemos en paz y contentos.  La dicha o la felicidad no depende de la cantidad de lo que tengamos, sino de la calidad con la que se obtienes y también de la manera como reaccionamos ante Dios; un corazón carente de gratitud no disfruta lo que tiene, porque agradecer es el gesto de reconocer que lo que tenemos es una bendición de Dios que nos hará bien. 

La Biblia también dice:

“Lo poco que tiene el hombre bueno es mejor que la mucha riqueza de los malos. Porque el Señor pondrá fin a los malos, pero sostendrá a los buenos.” Salmos 37:16-17 DHH94I

“El que ama el dinero, siempre quiere más; el que ama las riquezas, nunca cree tener bastante. Esto es también vana ilusión, porque mientras más se tiene, más se gasta. ¿Y qué se gana con tener, aparte de contemplar lo que se tiene? El que trabaja, coma poco o mucho, siempre duerme a gusto; al rico, en cambio, sus riquezas no lo dejan dormir.” Eclesiastés 5:10-12 DHH94I

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