Dios con su gracia siempre nos fortalecerá, nos hará reposar y nos preparará para la victoria en medio de este mundo adverso. Toda obra del diablo será derribada por el poder con el que Dios nos viste. Tomemos en cuenta buscar siempre a Dios para que nuestras vidas sean siempre consagradas para su gloria, porque siendo especiales para el, nada nos podrá derrotar en este mundo de mal.
Dios fortalece a sus hijos para que siempre podamos enfrentar todo lo que se opone como instrumento de satanás
para afectar nuestro crecimiento cristiano, todo aquello que se vuelve un obstáculo en nuestra vida cristiana. Satanás siempre buscará que ya no sigamos considerando a Dios como digno de alabanza, porque a través de los problemas que enfrentamos, tratará de hacernos pensar que Dios no existe o que no es capaz de ayudarnos.
Nada que obstruya nuestra vida debe derrotarnos, porque mayor es la fuerza del que va con nosotros, Dios nos hace partícipe de su poder invencible. Nunca debemos llegar a pensar que es imposible cruzar las adversidades, y por lo mismo no debemos renunciar a nuestra fe, por el contrario, Dios quiere que cuando vemos la manifestación de su poder en nuestra vida, al darnos la victoria, nuestra fe aumente.
Dios nos santifica para su gloria y para la victoria, nos prepara para que siempre seamos gratos delante de él, nos hace especiales y eso hasta satanás lo sabe, por eso es que buscará golpear nuestras vidas, pero su buscamos siempre el respaldo de Dios jamás el maligno logrará su propósito. Aunque el cansancio y la fatiga aquí en este mundo sean muchas por causa de las angustias y adversidades del mal, Dios siempre nos hará estar frescos, nos hará descansar y buscará que en medio de todo lo difícil estemos siempre en deleite.