Cundo sentimos que no podemos más, está bien que aceptemos nuestra insuficiencia, pero no está bien que nos consideremos la base de nuestro poder. Por esto hay que reconocer el poder de Cristo con el que lo imposible se hace posible. La aceptación del poder de Cristo es cuando confiamos en él por medio de la fe, lo cual significa creer, recibirlo en el corazón y dejarnos guisar por medio de su palabra. A Través de la Palabra conocemos a Cristo y así nos relacionamos con él en confianza.
Cuando alguien cree que lo puede todo en sí mismo es porque siempre se ha atribuido los logros, pero en realidad, todo lo que logramos es porque Dios lo permite. Dios nos creó y nuestra fuerza es de él y toda capacidad, pero no todo lo podemos. Hay circunstancia que nos hará probar nuestra pobre fuerza, pero aún más, el mal nos demuestra que somos débiles y que puede hacer de nosotros lo peor. Si por tus tribulaciones ya te agotaste y desmayaste, porque siente que no puedes más, esto Dios lo está permitiendo para hacerte entender que necesitas a Cristo. Recuerda estas palabras: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Filipenses 4:13