Dios quiere salvar tu vida.

En muchos casos el hombre no quiere buscar a Dios, pero en realidad, aunque muchos quisieran buscarlo no lo podrían encontrar, porque buscarían en otro lado y por medios erróneos. Dios se ha revelado por medio de Cristo, él fue anunciado en la Biblia y llegó al mundo justo como fue anticipado por Dios. Solamente por medio de la fe, que es un regalo de Dios, es como uno puede recibir como verdad la Palabra de Dios, y solamente así se puede creer en Cristo como el único y suficiente Salvador.

Pero cuando se cumplió el tiempo, Dios envió a su Hijo, que nació de una mujer, sometido a la ley de Moisés, para rescatarnos a los que estábamos bajo esa ley y concedernos gozar de los derechos de hijos de Dios.” Gálatas 4:4-5 DHH

Por no obedecer la ley de Dios merecíamos el castigo eterno, pero Cristo vino para sufrir nuestro castigo y para obedecer la ley de Dios que nosotros no podríamos obedecer por nuestra debilidad ante el pecado. Nadie puede llegar a ser hijo de Dios si no cree en Cristo y lo recibe como su único Salvador, y esto solo puede ser posible por la fe que Dios implanta en nuestro corazón por el obrar del Espíritu Santo a través de la Palabra revelada.

El pecado y la obra permanente de satanás incapacitan al hombre para poder conocer a Dios, por eso como un acto bendito de la gracia de Dios, es él quien se da a conocer por medio de Cristo, el cual fue enviado al mundo para que también sacrificara su vida, para que Dios nos perdone, quite nuestra culpa y nos libre de la condenación.

1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,” Hebreos 1:1-3 RVR1960

Es Dios el que nos hace consientes de nuestra pecaminosidad y de la gracia de Cristo para que por medio de él busquemos la salvación. Dios con el Espíritu Santo nos convence de nuestros pecados y nos revela a Cristo como el junto que murió para salvarnos derrotando así a satanás quien mantiene a los incrédulos sujetos a su voluntad pecaminosa y destructiva.

“7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí; 10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más; 11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.” Juan 16:7-11 RVR1960

Si sientes en tu vida la necesidad de creer en Cristo para recibir la salvación, debes creer ahora mismo, ya que lo que está ocurriendo en tu vida es la obra de Dios para que recibas a Cristo, y así obtengas la salvación, porque de inmediato tus pecados serán perdonados y tu culpa será quitada. En este momento debes obedecer estas palabras: Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.” Isaías 55:7 RVR1960

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