Los resultados del pecado en la vida de una persona es la muerte física, espiritual y eterna. Las personas por pecar contra Dios quedaron cortadas de su comunión y en la condición espiritual que hace que uno sufra todo el tiempo. Todos los males que existen en la vida y que causan malestares existen porque entró el pecado en la vida humana.
«Al final las personas que no crean en Cristo pasarán la eternidad separados de Dios totalmente bajo tormento. Los que confiamos en el sacrificio de Cristo, es porque creemos que él murió para pagar con su muerte la condenación por nuestros pecados, por eso somos libres de esta consecuencia espiritual, recibimos la vida eterna y tenemos la esperanza de gozar la gloria celestial por toda la eternidad.»
Todos merecemos la maldición por vivir opuestos a Dios, pero él nos ha provisto un camino para que volvamos a su presencia y cuando eso ocurre nos da lo más grandioso que uno puede recibir. Dios nos da la vida eterna por medio del sacrificio de Cristo, porque Dios llevó a cabo el plan perfecto para que nuestra culpa fuera pagada, sea quitada y de esta manera ya no estamos más bajo maldición, sino disfrutando sus bendiciones, las cuales inician con la posesión de la vida eterna.Todo el bien que podemos recibir es en la comunión con Dios, por eso Cristo vino para unirnos con él, todo lo que hizo fue reconciliarnos con Dios, para eso quitó el pecado de en medio y nos liberó del poder de satanás. Solo en Cristo hay perdón de pecados, ya no hay condenación y tenemos la victoria sobre satanás. Hoy satanás no se enfoca en quitarnos las bendiciones de Dios, sino en afectar la comunión con Dios, ya que precisamente, cuando la comunión está interrumpida nuestra vida sufre. Disfrutemos en todo momento la vida eterna y cada bendición de la comunión con Dios confesando siempre a Cristo.