Dios se manifiesta en la vida de quienes le adoran

El corazón que tiene alabanza para Dios es alegre y totalmente esperanzado

“Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos.” Sofonías 3:17 RVR1960

Cuando vivimos la presencia de Dios, reconocemos que el es el Señor de nuestras vida y nos sujetamos a su voluntad en una vida práctica de fe y siempre estamos dando frutos para su gloria, le correspondemos en alabanza espiritual, con una adoración ordenada y preparada.

Pero también le respondemos diariamente a través de todas las cosas que por su misma gracia nos tocan hacer; en ello tenemos fortaleza y la alegría por su presencia para poder enfrentar las luchas diarias que resultan de la oposición de satanás, los deseos del mundo y de nuestra carne. 

Dios espera cada día ser honrado a través de nuestra adoración y dispone sus bendiciones para atendernos; llena nuestras vidas de esperanzas que se cumplirán en el futuro. Nos ayuda a vivir el presente de manera dichosa, porque aunque hay momentos difíciles, con Él es posible superarlo todo. 

Hoy es un buen tiempo para ser renovados en el amor divino, abramos nuestro corazón para recibir su gracia y que en ello también atesoremos su Palabra que nos es traída constantemente y que nos convida a ofrecerle alabanza sincera.

La Biblia también dice:

“Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y de noche, y no hay para mí reposo. Pero tú eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel. En ti esperaron nuestros padres; Esperaron, y tú los libraste. Clamaron a ti, y fueron librados; Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.” Salmos 22:2-5 RVR1960

“Este es el día en que el Señor actuó; regocijémonos y alegrémonos en él.” Salmo 118:24 NVI

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