Dios tiene la dirección correcta para nuestras vidas, a través de la Biblia que es la revelación de su voluntad nos orienta hacia la verdadera prosperidad
Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en la senda de los pecadores ni cultiva la amistad de los blasfemos, sino que en la ley del SEÑOR se deleita, y día y noche medita en ella. Es como el árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan. ¡Todo cuanto hace prospera! Salmo 1: 1-3 NVI
Cuando es la palabra de Dios la que orienta nuestras vidas y la que nos nutre todos los días podemos estar vigorosos y vivificados, siempre listos para corresponder a Dios en lo que Él disponga. Nuestra vida aquí tiene un propósito de servicio y de buenos frutos para el bien de la humanidad y para gloria de Dios, nuestro paso por esta vida tiene una razón en los decretos eternos de Dios, de lo cual también daremos cuentas.
Es por esto por lo que debemos cerrar nuestros oídos a las palabras nocivas y actitudes que no nos ayudan a corresponderle a Dios en su propósito. Dejemos todo camino, pensamiento, palabras y acciones que deshonren a Dios y enfoquémonos en lo que nos hará producir lo mejor para Dios. Hoy es un buen tiempo para apartarnos del mal, para seguir el bien y para que siempre hagamos el bien.
La Biblia también dice:
Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. Josué 1:8 RVR1960.
El camino del hombre recto evita el mal; el que quiere salvar su vida se fija por dónde va. Proverbios 16:17 NVI.
Por otra parte, si el malvado se aleja de su maldad y practica el derecho y la justicia, salvará su vida. Ezequiel 18:27 NVI.