Honremos a Dios porque no podemos escapar de su presencia

No tenemos que huir de la presencia de Dios porque no podemos y porque no nos conviene, lo mejor que podemos hacer es aceptar el ofrecimiento de su amor, ya que siempre nos busca con el único interés de bendecirnos, y para que en arrepentimiento aceptemos la oferta del perdón y de la vida eterna.

No podremos escapar de Dios y se su ira si no confesamos de corazón aceptando que somos pecadores y que reconocemos a Cristo como nuestro único salvador. Este tiempo es la oportunidad que Dios nos da para reconocer que sin su misericordia la vida no puede ser vivida al máximo y con esperanza futura. Busquemos que la presencia de Dios se manifieste en nuestro ser interior, para que erradique el medio y la aflicción que no nos dejan vivir plenamente.

Ante las situaciones mundiales que hoy enfrentamos tenemos que aceptar que si no fuera por la misericordia de Dios y por su grande amor con que nos busca, ya estuviéramos destruidos, por eso ya debemos tratar de evadir a Dios, sino más bien, entrar en una relación íntima y fiel con él.

Compartir