Abunda el contentamiento en el corazón de la persona que tiene presente la Palabra de Dios, porque la Palabra de Dios es verdad y la verdad es Cristo. De Dios viene la Palaba, y es en Dios en donde se originó la existencia de la vida. El ser humano quedó bajo muerte, cuando desechó la Palabra de Dios, para darle cabida a la palabra de diablo, quien ha venido para matar y destruir.
«Satanás lleva por el camino malo, en donde la vida se vive opuesta a Dios y por lo mismo fuera de las bendiciones y promesas divinas. Satanás tiene como propósito que Dios destruya al ser humano como castigo por el pecado, y así ocurrirá para con aquellos que desprecien a Cristo como la respuesta de Dios para que seamos unidos a él, perdonados y liberados del pecado.»
Dios nos creó para que seamos felices disfrutando de él para siempre, por eso nos creó para estar unidos a él, ya que en la relación con él está la posibilidad de disfrutar la vida. Dios nos creó ciertamente con un cuerpo físico, pero también nos hizo seres espirituales para tener esa relación espiritual que nos haría desbordar en felicidad y nos dio Su Palabra para que eso ocurriera para siempre, sin embargo, la Palabra fue menospreciada por el ser humano.Hoy debemos volver a la comunión con Dios por la senda que él nos ha provisto, ya que nos ha dado a Cristo quien es el camino, la verdad y la vida, y es así como podemos vivir la vida correcta en Dios y tener la vida eterna bienaventurada. Hay que despreciar toda palabra mentirosa de satanás, porque sus consejos nos alejan de Dios y nos oponen a su voluntad y propósito y en ello se vive la peor calidad de vida, porque esa condición es una condición espiritual sin Dios y sin su dirección. No aceptemos ninguna dirección contraria a Dios, ni consintamos practicar la maldad, porque en esa situación de vida no hay felicidad ni ahora, ni en el porvenir. Seamos felices viviendo en Cristo quién es la Palabra y la Verdad.