Hoy disfrutamos la presencia de Dios y un día nos gozaremos en su gloria eterna

La bendición más grande que podemos tener es la presencia de Dios, Dios nos creó para estar siempre en comunión con nosotros y eso era lo que más bien nos hacía. Ante esta realidad, satanás buscó separarnos de Dios, pues él sabe que si lograba eso nos llevaría a la peor condición de la vida, pues su propósito es nuestra muerte y destrucción.

«El pecado separa de Dios, nos hace vivir en contra de Dios, por eso es por lo que el pecado es muerte y hace que uno esté siempre bajo sufrimientos espirituales y físicos. Por todo esto, el deseo de Dios es que estemos en comunión con él a través de Cristo, ya que él vino a la tierra para resolver todo nuestro problema espiritual. Hoy podemos tener la presencia de Dios y vivimos en la esperanza de ver su gloria para siempre ya sea en el día de nuestra muerte o cuando Cristo venga de nuevo a la tierra.»

Por la presencia de Dios en nuestras vidas de manera espiritual, debemos sentir seguridad para vivir todo el tiempo, aunque sean momentos difíciles, hay que hacer la voluntad de Dios y gozarnos en él, porque nos toma de la mano para guiarnos y sostenernos. Si Dios va de nuestro lado y a nuestro favor no debemos desanimarnos, ni mucho menos querer retroceder por las cosas difíciles de esta vida.  Dios nos muestra su voluntad, nos fortalece con su Palabra y nos revela todas las promesas para que nos sintamos bien y estemos siempre atentos a su voz. Cuando atesoramos el evangelio como el mensaje de la Biblia Dios nos ayuda a confiar y a obedecer, porque justamente ahí nos muestra Dios todas sus bendiciones y la guía para la práctica de nuestra fe. Disfrutemos la presencia de Dios todos los días y tengamos la esperanza de su gloria eterna.

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